Como todo buen Larry que se precie, "Love for Sail" comienza con el abandono a que el ligón es sometido por su última conquista en el juego anterior. En este caso es Shamara, aquella hermosa chica a la que Larry rescató de una crisis existencial en La Costa Lotta, quien deja a nuestro amigo en una situación comprometida (concretamente, encadenado a una cama en llamas). Pese a salir escaldado del asunto, Larry no se deja amedrentar y se embarca en un crucero - el lugar ideal para continuar dedicándose a su tarea favorita.

Como ya ocurriera en Larry 6, este nuevo episodio de la saga se centra en las conquistas y ligoteos de Larry. ¿Para qué hace falta argumento en un juego así? Lo que la gente quiere es un montón de tías con las que Larry protagonice las absurdas y humillantes escenas que le caracterizan. Lejos quedaron los tiempos de las complicadas tramas de Larry 5 - fracasos estrepitosos a juzgar por la respuesta que el juego obtuvo del público.

La estructura del juego es muy simple, todo se reduce a satisfacer los caprichos y deseos de las diveras féminas con las que Larry se encuentra con el único objetivo de llevarlas al huerto. A todo esto hay que añadir un concurso en el que Larry participa realizando varias pruebas, con un sabroso premio para el ganador: poder pasar una semana en la intimidad junto a la sensual capitana del barco. ¡Ah! Y también está la búsqueda de los "consolators", unos pequeños consoladores disfrazados de "¿Dónde está Wally?" que están escondidos por todo el escenario del juego.

El juego se maneja mediante un cursor con forma de condón que se desenrosca cuando pasa sobre un "punto caliente" de la pantalla. Cuando pulsamos el botón del ratón con el cursor situado sobre algún elemento interactivo, aparece un menú de verbos 'sensible al contexto' que ofrece las acciones válidas para ese elemento. Además hay una opción que nos permite teclear otros verbos si los que el menú nos ofrece nos resultan insuficientes.

El sistema de conversaciones se basa en un menú de tópicos sobre los que hablar e incluye también una opción para introducir vía teclado tópicos adicionales.

También se pone al alcance del jugador una ventana de inventario, un plano del barco para desplazarse por él rápidamente, un control de la velocidad de caminar de Larry, un mezclador que permite controlar los volúmenes de la música, las voces y los efectos de sonido, y otras curiosas opciones tales como el "nivel de asquerosidad" y un "estabilizador del barco".

La realización es muy buena. De todos los juegos de Sierra que se han hecho mediante dibujos animados éste es, con diferencia, el que cuenta con mejores animaciones. Los fondos son simples pero están bien dibujados y tienen un colorido perfectamente conseguido. La música es de buena calidad, y está digitalizada (nada de MIDI), así que suena todo lo bien que puede en tarjetas de 16 bits stéreo tipo Sound Blaster 16.

Como conjunto, Larry 7 funciona perfectamente: está bien realizado, es muy maniobrable y cómodo de manejar, ofrece una flexibilidad adecuada y, sobre todo, es divertido. No es un juego muy largo y no dará ningún problema a aventureros expertos, pero sin duda vale las cinco mil pelas que cuesta.

La pista: Un buen explosivo puede ayudarte a ganar una partida de bolos. Jugando con el teclado: Ctrl-P te servirá para entrar en el modo psicodélico y Ctrl-C para hacer trampas en el juego de los dados. Cybercrap: Entre las diversas tonterías que el juego ofrece están el Cybersniff 2000 (permite experimentar los olores del juego), el CyberStar 2000 (permite insertar tu cara en el juego) y otras cyber-paridas similares. Los huevos de Larry: Si encuentras todos los huevos de pascua, los 32 consolators y los 1000 puntos del juego podrás ver una escena adicional al final de éste.

Juego comentado de manera políticamente correcta por Raúl Álvarez.